AMO A ICA
Joel Muñoz García
Amo a Ica
la tierra buena
la tierra hermosa
del sol eterno.
la tierra buena
la tierra hermosa
del sol eterno.
La amo
en la dimensión
del tiempo
y la grandeza.
en la dimensión
del tiempo
y la grandeza.
La amo
cuando el rocío
cuando el rocío
humedece las hojas
de los árboles.
de los árboles.
La amo
cuando el viento
me trae la canción
de las palomas.
cuando el viento
me trae la canción
de las palomas.
II
Dios sabe
que la amo
que la amo
desde el comienzo
de los siglos.
Porque soy
el cántaro que guarda
los secretos
de su historia
porque soy
la mano que diseña
el enigma
de sus telas.
el cántaro que guarda
los secretos
de su historia
porque soy
la mano que diseña
el enigma
de sus telas.
Porque soy
el maíz
que brota
en sus parcelas.
Porque soy
el algodón
que blanquea
sus praderas.
el maíz
que brota
en sus parcelas.
Porque soy
el algodón
que blanquea
sus praderas.
III
Bendita seas
bondadosa Ica mía
porque eres la ternura
eres la alegría.
bondadosa Ica mía
porque eres la ternura
eres la alegría.
Déjame
que riegue
tus ciruelos
y tus mangos.
que riegue
tus ciruelos
y tus mangos.
Déjame
que coseche
tus higueras
y pacaes.
que coseche
tus higueras
y pacaes.
Déjame
que yo sea
el guardián
de tus huarangos.
que yo sea
el guardián
de tus huarangos.
Que me alegre
jugando
con los niños
en el parque
que me divierta
bailando contigo
una jugosa marinera.
jugando
con los niños
en el parque
que me divierta
bailando contigo
una jugosa marinera.
IV
Ica linda
vives
en mi alma
como una bendición.
vives
en mi alma
como una bendición.
Como la rosa
que perfuma
los caminos
de la vida.
que perfuma
los caminos
de la vida.
como las uvas
que endulzan
mis palabras
con su miel.
que endulzan
mis palabras
con su miel.
Como la plegaria
que se eleva
silenciosa
desde Luren.
que se eleva
silenciosa
desde Luren.
Como
la sirena
que canta
en Huacachina.
la sirena
que canta
en Huacachina.
Yo te amo
Ica
en toda la extensión
del universo.
Ica
en toda la extensión
del universo.
Yo te amo
Ica
en toda la extensión
del universo.
Ica
en toda la extensión
del universo.
SERENATA A LA AMADA INOLVIDABLE
Antenor Maraví Izarra
Hoy es tu día
mi dulce, amada Ica.
La de los ángeles y héroes olvidados,
viento de sudores ardientes.
Los pulmones acerados
de tus médanos y dunas
están gritando…¡Feliz Día!.
mi dulce, amada Ica.
La de los ángeles y héroes olvidados,
viento de sudores ardientes.
Los pulmones acerados
de tus médanos y dunas
están gritando…¡Feliz Día!.
Mi corazón, volcán
de cielo encadenado,
bate palmas azules
al viento de los mares.
Mis ojos parpadeantes
como campanas enamoradas,
abren sus cadenas de amor
para abrazarte con rubor
de mil alboradas.
Maravillosa aurora
pericarpio extendido
en los tallos espaciales
pericarpio extendido
en los tallos espaciales
del grito milenario,
de los Paracas y Nascas
sur y norte del arado triunfante
que nunca entregaron sus pechos
al yugo invasor.
de los Paracas y Nascas
sur y norte del arado triunfante
que nunca entregaron sus pechos
al yugo invasor.
Tierra onírica de la Chumbillaya,
oasis de luciérnagas encantadas,
botija ardiente de lagares y serpentines,
ubre mágica de piscos y vinos sonrientes.
Eres, mi bella y amada Ica.
Mirad, mi señora hermosa
es la brisa mañanera de junio
sembrada por don Luis Jerónimo de Cabrera
que hoy, empieza a cabalgar
en el sayal enamorado
de Antonia Moreno de Cáceres
y Catalina Buendía de Pecho.
en el sayal enamorado
de Antonia Moreno de Cáceres
y Catalina Buendía de Pecho.
Con sus manos llenas de sol
vienen a ofrecerte guirnaldas
atesoradas en amorosos pechos.
vienen a ofrecerte guirnaldas
atesoradas en amorosos pechos.
Aquí está, vive y sonríe,
está presente con nosotros,
es tristitia y la danza de las horas,
enlazadas en la cena pascual
del hermano ausente.
Mirad, es Abraham Valdelomar
acaba de cruzar el arco triunfal
de los nibelungos y los dolientes colores,
del cholo gigante, Sérvulo Gutiérrez,
que danzan en ritual abrazo molecular.
está presente con nosotros,
es tristitia y la danza de las horas,
enlazadas en la cena pascual
del hermano ausente.
Mirad, es Abraham Valdelomar
acaba de cruzar el arco triunfal
de los nibelungos y los dolientes colores,
del cholo gigante, Sérvulo Gutiérrez,
que danzan en ritual abrazo molecular.
Mirad, cuanta arenga auroral
cuantos rostros caudalosos.
Son tus hijos, sí, son ellos
que sembraron la floresta legendaria
de la Achirana y Huacachina
escoltadas de huarangos sonrientes,
hoy flamean en nuestros libros.
cuantos rostros caudalosos.
Son tus hijos, sí, son ellos
que sembraron la floresta legendaria
de la Achirana y Huacachina
escoltadas de huarangos sonrientes,
hoy flamean en nuestros libros.
Oh, tierra pródiga
de mangos y pallares en vigilia
de edades que se arquean
en las alas victoriosas
de inolvidables batallas de amor.
También yo, he venido a saludarte,
he venido con mi pecho descubierto
para regalarte mis mejores sudores,
encadenados en collares de lágrimas
he venido, para gritar a los cuatro vientos.
he venido con mi pecho descubierto
para regalarte mis mejores sudores,
encadenados en collares de lágrimas
he venido, para gritar a los cuatro vientos.
¡Que viva, mi amada, la inolvidable!
tierra de eterno sol y los siete sarmientos,
de oraciones siempre crepitantes
en los labios de viñedos ardientes.
Caravana de interminables juramentos
donde el beso es fragua permanente
y la unión fuerza incomparable de luz.
Que viva Ica, la siempre generosa,
posada infinita del Señor de Luren,
de pañadoras de algodón y alfareros del alba
siempre reverberantes en los gritos de libertad.
¡Que viva Ica, la tierra bendita
donde nació mi patria peruana!.
CANTO A ICA
Juan Contreras Sosa (*)
Ubérrima tierra donde frutece
la celeste semilla que no se siembra,
donde lo que no se sueña ni se riega
florece en cielos de gloria y de amor.
Polvoriento valle de luz y bonanza
donde el sol riza su cabellera de oro;
donde el tiempo con transitorios pétalos
nos ciñe de buganvillas y azucenas.
Tierra cálida sedienta y áurea,
transida de misterios, florida de besos.
Básica esmeralda, musa de mi canto:
Por ti la ilusión es hada que canta y llora
entre hechizantes dunas y breves toñuces;
por ti el olvido tiene dulzura de dátil.
Tierra de relumbre y añeja prestancia,
de entre frescas rosas y embrujantes racimos
emergen gráciles, gentiles y risueñas
-como glaucos lucero o fragantes palomas-
las pisqueñas, las chinchanas,¡las iqueñas!
más dulces que las uvas.
más bellas que las rosas!


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